Enrique Jiménez Carrero, pintor y escultor extremeño,natural de Granadilla (Cáceres), donde nace el 18 de marzo de 1953.
Se forma artísticamente entre la Escuela de Bellas Artes de Santa Cruz de Tenerife y la Escuela Superior de Bellas Artes de San Fernando, Madrid. En su faceta de diseñador, a parte de otros trabajos, ha realizado sellos para el Correo Español y emisiones conjuntas con otros países.
Desde 1974 su obra se ha exibido en más de 70 exposiciones individuales en museos, galerías y otros espacios de carácter cultural. En 2005 realiza la exposición "cuando Granadilla", visitada por más de 37.000 personas. En 2007 fue el primer artista español en exponer sus obras en Doha, Qatar. En 2009 más de 40.000 personas pasaron en poco más de un mes por su última exposición en Salamanca. Durante 2010 se realizó por primera vez una exposición en la Catedral de Plasencia con una selección de diez obras de Jiménez Carrero.
Hoy parte de su obra permanece en pinacotecas y colecciones públicas y privadas en España, Francia, Alemania, Reino Unido, Italia, Qatar, EE.UU, Méjico, Colombia o Japón.
Presentación exposición "Pasión por la vida"
La pasión que ilustra los sentidos
Comenzó la andadura con una maleta al hombro, o quizás antes, con el recuerdo de una silla que quería echar raíces en terreno anegado. El paso del tiempo reflejado sobre azulejos o espejos velados fue transfigurando la melancolía y el recuerdo en un relato onírico lleno de vida, de Pasión por la Vida.
El lienzo rasgado ya dejaba ver, por aquel entonces, una realidad más allá de la que aparentemente se percibía. Con cada trampantojo, una nota pegada con celo sobre el lienzo prevenía de la limitación de nuestra capacidad sensitiva, el testimonio falaz de los sentidos que iluminó René Descartes. Cada puerta, casi siempre cerrada, guardaba un hueco por el que abrir de par en par el paso a la intuición. Una postal con sello y remitente que invitaba a pasar al otro lado del cuadro y que ahora insinúa la prolongación de la obra en nuestro espacio, la acogida de los personajes que se salen del cuadro y que, como en La Rosa Púrpura del Cairo de Woody Allen, se acomodan con elegancia en nuestro imaginario cautivando una nueva realidad.
J. Carrero. Obra
"Lo que para uno está en último plano, se halla para otro en primer término. El paisaje ordena sus tamaños y sus distancias de acuerdo con nuestra retina, y nuestro corazón reparte los acentos. La perspectiva visual y la intelectual se complican con la perspectiva de la valoración". José Ortega y Gasset. El Espectador.
Es esta, por tanto, una exposición para la creación propia de un mundo dentro del universo de Jiménez Carrero, como el cuadro dentro del cuadro, para adentrarse en el significado de la interpretación de unos clásicos cuya esencia resulta vigente, en el sentido de unas miradas capaces de detener el tiempo, en la expresión corporal que se impulsa al ritmo de los acordes de la fantasía, en el albedrío libre a lomos de su corcel o en la fascinante transfiguración que retrata el carnaval.
La vida, el origen, el primer color que fue denominado por el hombre conquista ahora la paleta del pintor para impregnar el lienzo al compás de la pasión, inherente a las inquietudes humanas y al corazón. No es trivial que el rojo sea ahora el vínculo y la seña de identidad de este periodo de la obra del artista, que inunda de vitalidad, carácter y dinamismo de sus pinturas.
Se exponen ahora las obras más representativas de la última etapa pictórica de Enrique Jiménez Carrero. Diez años de trabajo e investigación que han originado una importante evolución también en su técnica y proceso artístico, fusionando la tradicional pintura al óleo con técnicas de impresión digital. La exposición ha sido concebida para abstraer al visitante y ofrecerle un espacio idóneo para el ensimismamiento y la fantasía. El espectador puede adentrarse en el universo mágico de la pintura de Carrero y soñar la historia que subyace de cada imagen, o dejarse llevar por el relato que algunos autores han imaginado. Un recorrido a través de cinco áreas temáticas que recogen aspectos profundamente emocionales y humanísticos. Una loa al arte y la creación, una escapada al optimismo y la contemplación de la belleza, una desmedida Pasión por la Vida.
Enrique Jiménez Domínguez
Comisario de la Exposición
Es impresionante ya si que me he convencido estoy enamorada del color rojo, cuanta vida en sus movimientos gracias Epi
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